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Nicolás Meyer y Juan Cabrera:"Biodanza es un sistema de afecciones corporales"

Nicolás Meyer y Juan Cabrera:"Biodanza es un sistema de afecciones corporales"

Con los cuerpos todavía tibios, luego de dirigir una estimulante clase de Biodanza, los profesores Nicolás Meyer y Juan Cabrera aceptaban contestar algunas preguntas y profundizar sobre Biodanza.

--¿Cómo es una clase de Biodanza?

Nicolás:

Hmm. Es un encuentro en el cual se intenta recrear una atmósfera de trasformación que genere un impacto positivo en nuestra integración afectiva y nuestros vínculos, en base a diferentes músicas, danzas y movimientos, un reaprendizaje de las funciones originarias de vida, mediante la dimensión ritual que propone la danza. Lo que buscamos es que los participantes puedan vincularse con sus danzas, y así generar un paisaje de modos de existencia que facilite el reestablecimiento de los lazos afectivos. Es lo que propone el fundador de Biodanza, Rolando Toro.

--Es decir, se trabaja sólo con el cuerpo?

Nicolás

Si, en la medida que consideremos el cuerpo una unidad inseparable cede de sentimientos, deseos, pensamientos…

Es que el cuerpo es una estructura compleja de acciones y reacciones. Biodanza presupone la inter-corporeidad como originaria bajo dos aspectos: por un lado porque él es, en tanto individuo singular, una unión de cuerpos, y por el otro, porque su vida se realiza en la coexistencia con otros cuerpos externos. El cuerpo está expuesto a la acción de todos los cuerpos exteriores que lo rodean y de los cuales necesita para conservarse, regenerarse, transformarse, y al mismo tiempo es necesario para la conservación, regeneración y transformación de otros cuerpos. Un cuerpo humano es tanto más fuerte, más potente, más apto a la conservación, regeneración y transformación cuanto más ricas y complejas sean sus relaciones con otros cuerpos, esto es, cuanto más amplio y complejo sea el sistema de las afecciones corporales.

--¿Qué diferencia hay entre la Biodanza y otras técnicas, como psicodrama?

Juan:

Lo que introduce Rolando es la vivencia integradora para conectarnos con la parte luminosa que todos tenemos…

--¿La parte luminosa?

Nicolás:

Por lo general la psicoterapia y técnicas similares trabajan sobre la persona, en forma verbal sobre sus conflictos, los problemas, y puede producir buenos resultados o no. Lo que ha traído Rolando es el movimiento con sentido del cuerpo y la vivencia, que es un estado en el cual todo nuestro cuerpo se compromete en la acción. Entonces, los problemas no se solucionan con un trabajo verbal, consciente sino a través de la vivencia que es un pasaje de estados de mayor consciencia de sí a estados de regresión, produciendo renovación orgánica. Más allá de los problemas que todos tenemos, todos podemos hacer Biodanza. Se trata de conectarse con aquella parte sana que tenemos, es decir, la parte luminosa. Biodanza es un sistema de afecciones corporales ya que entiende que por esencia el cuerpo es relacional: constituido por relaciones internas entre sus órganos, por relaciones externas con otros cuerpos y por afecciones, esto es, por la capacidad de afectar de alegría a otros cuerpos y de ser por ellos afectado, regenerándose con ellos y regenerándolos.

Juan:

Además, las sesiones de Biodanza son muy lindas, pueden articular aspectos bellos de las personas que ninguna otra técnica puede hacer. Entonces, lo que nosotros podemos hacer alcanza resultados en la medida en que haya más regularidad en el proceso de trabajo. La gente cambia o ve los resultados con el tiempo, no en forma inmediata.

--¿Podemos volver al concepto de la belleza?

Juan:

La belleza y la creatividad son sanadoras porque pueden refundar la vida. Nosotros buscamos belleza porque también buscamos la plenitud, vivir sin trabas. La belleza está en la plenitud y en la emoción que se puede alcanzar a pesar del estilo de vida moderno con sus obstáculos y trabas.  

Juan:

Biodanza busca que la persona se sienta realmente viva. Ser realmente uno mismo es tener una vida saludable. Y lo que nos potencia es compartir un modo de producción acorde a nuestro modo de existencia.

--Imagino que Ustedes también aprenden de sus alumnos...

Nicolás:

Sí, constantemente. Es un trabajo de abrirse a las diferencias. Como facilitador uno debe ser consciente de los procesos que transitan los participantes de grupo. Dando clase uno revive su propia vivencia y la enfoca desde otro lugar pero para conducir una clase de Biodanza hay que conocer a fondo la propia experiencia. 

--Participan Ustedes en las clases?

Juan:

En las clases estamos por momentos dentro y por momentos fuera. Si no estamos conectados a la emoción no podemos transmitir lo que la gente necesita. Pero no es como un actor en un escenario. Uno tiene que estar en la vivencia pero jugando un rol sutil. No es complicado. La actitud del profesor es muy importante porque tiene que gustarle la gente, su grupo, amar a todos. Uno tiene que amar a todos. Como dice Rolando “amo, luego existo”, porque uno se siente vivo cuando ama.

Nicolás:

El grupo es esencial en Biodanza. El grupo hace posible el cambio de actitud, la trasformación. Acá no hay comunicación verbal; todo el trabajo es con la danza, con el cuerpo, con el encuentro.

--¿Imagino que pueden surgir conflictos…?

Juan:

Claro que los hay y por eso hay que estar preparado. El grupo de Biodanza es un espacio de contención. Lo más importante es lograr continuidad, pues de esta manera cambia el sentido de lo que uno está haciendo. Para lograr buena continuidad y notar cambios positivos es esencial tener regularidad. A veces vienen personas con problemas que no podemos solucionar, pero podemos dar contención, celebrar la vida pese a todo, es una necesidad. En la sociedad de consumo el placer natural no se toma en cuenta, porque son los intereses los que dominan, lo artificial y paradójicamente estamos cada vez más solos en esta era de tecnologización de la comunicación. La propuesta de Biodanza es reeducar para estar más conectados con los instintos y las fuerzas originarias.

--Hmm

Juan:

Uno puede caminar por la calle observando el modo de caminar de la gente, sus cuerpo, sus expresiones, los gestos, y entonces nos damos, el paradigma del sacrificio eterno sigue imperando, nos damos cuenta que la gente no vive con naturalidad en la sociedad. Es un poco diferente en el campo, pues allí hay más contacto con la naturaleza. Lo ideal sería que todo el mundo tuviera un jardín, con sus plantas, cuidándolas...sería mucho mejor, verdad? Pero hablando de Biodanza, yo creo que está a la vanguardia del cambio, un cambio de las personas. El cambio radical tiene que tomar lugar en el interior de las personas. Lo que vemos es que cuando se producen estos cambios interiores, la gente cambia en todos los sentidos: profesionalmente, intelectualmente, en su trabajo, con su familia, etc. ¿Por qué? Porque están en armonía. Lo más novedoso que trae Rolando es la danza, el movimiento del cuerpo. Pero no es necesario “saber danzar” en el sentido usual de la palabra. La danza que nosotros hacemos es una danza capaz de transmitir energía, una herramienta muy poderosa. El problema es que hemos perdido la noción de la danza como ritual, como ceremonia, que todos los pueblos han tenido históricamente, y eso es lo que Rolando ha hecho, es decir, ha estudiado profundamente los diferentes tipos de danzas.

--Qué tipos de música usan?

Nicolás:

La música es rigurosamente seleccionada para estimular los eco-factores relacionados con las cinco líneas de vivencia. Denominamos "música orgánica" aquellas que presentan atributos biológicos y generan ecofactores positivos y una atmósfera enriquecedora y orgánica: fluidez, armonía, ritmo, tono, unidad de sentido y efectos cenestésicos: éstas tienen el poder de inducir vivencias integradoras. Debido a que la música puede despertar vivencias intensas, su selección en Biodanza obedece a criterios semánticos, es decir, a sus significaciones temáticas, emocionales y vivenciales. La música puede despertar emociones sentimentales eróticas, eufóricas, nostálgicas, etc., las cuales, al ser danzadas, se transforman en vivencias.

Juan:

La conexión con las personas es esencial en todo acto de rehabilitación o curación, no existe crecimiento solitario (las técnicas místicas o terapéuticas de carácter solipsista son una falacia). El contacto con otras personas es lo que permite el crecimiento. La conexión verbal es insuficiente. Es necesario el contacto, la danza en pareja ó colectiva y el compromiso corporal dentro de un contexto sensible, sutil y en feed-back.

Nicolás:

Sobre los efectos terapéuticos y pedagógicos de la caricia, actualmente existen múltiples investigaciones científicas. Centenares de autores han descubierto que el contacto valoriza y da continente afectivo a las personas. Sin embargo, no basta el contacto. Es necesario la conexión, es decir, que cualquier forma de vínculo físico esté movido por una fuerza afectiva sincera. Las terapias que no tienen compromiso corporal son disociativas, ya que trabajan sólo a nivel de la conciencia y no en las vivencias significativas de amor y comunión.

--¿El rol de la vivencia?

Juan:

Biodanza se orienta a la deflagración de vivencias integradoras, capaces de superar las disociaciones que induce nuestra cultura. Actualmente un gran número de personas viven estados de disociación psicosomática. Piensan en algo, sienten en forma diferente y actúan de modo disociado respecto a lo que sienten. La unidad de nuestra existencia está en permanente crisis. Es a través de las vivencias que se perfecciona la unidad neurofísiológica y existencial de ser humano. La vivencia es la sensación de estar vivo "aquí-ahora" y posee fuertes componentes cenestésicos y emocionales. Las vivencias tienen diferentes matices emocionales, tales como euforia, erotismo, ternura, paz interior, etc.

Cuando una persona decide hacer un cambio de rumbo en su vida, él mismo se vuelve trascendente...,y si apunta a dejar atrás un sistema que lo ahoga emocionalmente y no le permite relacionarse con amplitud y generosidad, es el momento ideal de conocer e ingresar a Biodanza, una técnica relacional que potencia los vínculos afectivos y nos conecta con nuestros más profundos sueños y el deseo de concretarlos en vida, buscamos crecer y desarrollar nuestra existencia en un acto de plenitud y abundante belleza, la decisión esta tomada, nuestro camino es el corazón. 

Nicolás:

El estilo de vida moderno nos propone rituales obsesivos para escapar del pavor cósmico. En vez de promover el amor agotamos formas cada vez más racionales de vincularnos. Junto a Juan proponemos un espacio de composición afectiva y una actividad configuradora para expresar toda nuestra potencia, habitar un paisaje de modos de existencia con autoconocimiento responsable. La decisión es irrevocable...  la alegría no es el premio a la virtud sino la virtud misma, la felicidad en la vida es la vida misma.

Contactos:

biodanzaestudiouno@gmail.com / elnuevojuan@yahoo.com.ar

nickmeyer40@hotmail.com

Web: http://www.biodanza.org / http://biodanza.com.ar

Teléfonos: (05411) 4776 3123 15 56 07 44 03 / 15 63 77 34 98

 
Cel: 1562521028

1 comentario

Rodri -

Un placer leerte Nico, ya como maestro, de una tecnica tan bella como la biodanza.
te quiero mucho
rodri.