Elizabeth Botturi y los masajes tailaneses: "El ser humano es holístico."

     Elizabeth tiene manos muy expresivas, y su voz tranquiliza con tonos seguros y graves. Hace un poco de todo: teatro, masajes, aunque de profesión es psicóloga y en un momento efectúo una muy profunda experiencia trabajando con discapacitados mentales. Habló con Jaquematepress apasionadamente acerca de sus actividades creativas.

--Ha acumulado experiencia en varios campos…

--Es cierto, pero comencé estudiando psicología y durante mucho tiempo me dediqué a trabajar con los discapacitados mentales. Esa experiencia me hizo tomar más conciencia sobre la posibilidad de trabajar corporalmente, y luego indagué sobre las muy variadas técnicas corporales.

--Hmm. Es decir, al trabajar con personas con problemas mentales utilizó el movimiento…?

--Sí y la repuesta fue bárbara! Eran chicos de 17 y 18 años y fue una experiencia maravillosa. Pero llegó un momento cuando francamente no pude más…

--¿Qué aspecto del trabajo le parecía más significativo?

--Yo pienso que lo más importante es mejor la calidad de vida, porque los problemas de los discapacitados mentales guardan una estrecha relación con muchas otras cuestiones, con el entorno familiar, con la neurología, con los hormonas, y es esencial hablar con los familiares, establecer grupos terapéuticos. El ser humano es un ser holístico. Entonces, cuanto mejor esté una persona en su interior, mejor es su aspecto físico.

--Imagino que Usted hace una especie de puente entre Occidente y Oriente…

--Yo no estoy en condiciones de opinar mucho sobre eso, pues todavía me faltan conocimientos. De todos modos le puedo decir que en Oriente hay otro concepto del hombre, más integral, y otra mentalidad con respecto a los problemas mentales y físicos. Entre ellos el hombre está en el centro. Entonces, se considera que un dolor es el resultado del entorno afectivo de la persona.

--Es decir, la energía...

--El centro energético está ubicado en la zona del ombligo. Se comienza el trabajo allí, para estimular el fluir de la energía.

--¿Cómo es una sesión de trabajo con una paciente?

--Siempre comenzamos el tratamiento diciendo el "mantra," tal como hacían los maestros orientales muchos años antes de Cristo. Sucede que Tailandia en ese momento era el centro de paso de los comerciantes que iban de Japón a China. Llegaban muy cansados y de ese modo nace lo que hoy llamamos los masajes tailandeses. Ahora bien, volviendo a nuestro trabajo, digo, se empieza con algunas frases de los sabios. Hay que tratar a los pacientes con mucho respecto, pedir su permiso para comenzar el masaje.

--Vamos a suponer que el paciente es Juan y está mal, muy deprimido y con dolores…

--Le explicamos que el primer paso será un masaje tailandés, para acomodar un poco su dolor, para luego ir curándolo en forma integral. Para una persona que está mal físicamente o mentalmente, lo que se propone es un camino hacia la paz, con masajes de una hora o un poco más, en un ambiente muy tranquilo, con música, llevándolo a ese estado previo a dormir.

--¿Hay un intercambio de energía entre el paciente el la masajista?

--Sí y es el caso especialmente con los masajes tailandeses. En realidad, el terapeuta descansa en el paciente. Pero antes siempre se hace un "tai."

--¿Qué es un tai?

--Es un ejercicio que facilita el fluir de la energía, que hace posible descansar en la energía de la persona que recibe el masaje, acomodándola. Lo que tiene diferente de otros tipos de masaje es que el paciente se acuesta en el piso, sobre un colchón oriental de algodón natural. Da la sensación de estar hundiéndose en el colchón, como si uno estuviera flotando. El paciente va moviéndose de manera tal que no tiene tensiones en el cuerpo, pues para que perciba los beneficios del trabajo.

--¿Es el momento cuando aparece el intercambio de energía?

--Es que siempre hay intercambio de energía. Hay que tomar conciencia sobre lo que se trabaja con el masaje tailandés. Se trabaja con líneas de energía en el masaje tailandés y las líneas pasan por diferente partes del cuerpo.

--¿Es el trabajo igual para hombres y mujeres?

--Yo he trabajo con los dos sexos y no he notado nada distinto, salvo, claro, la sexualidad. Son personas que tienen problemas, angustias, les faltan cosas…

--¿Hay una sola masajista o se trabaja con varias manos?

--Es absolutamente individual.

--¿Se aconseja alguna dieta especial?

--Todo depende del estilo de vida de cada uno, y eso depende también de la sociedad en la cual vive el paciente. Ser vegetariano no es una condición necesaria.

--¡Muchos casos muy especiales habrá tenido!

--Llegó una vez un actor muy tensionado, luego de muchos ensayos. Le hice un masaje del pie hasta la rodilla durante unos 45 minutos. Cuando terminé tuve una sensación de gran satisfacción, pues el actor me dijo que "sentí como una persona en el momento cuando entré para tomar el masaje, y otra muy distinta cuando salí."

Contacto: [e-mail]