Maratón en Punta Alta:a volar con las palabras, como las aves con sus alas...

    Llegaron de diferentes puntos de Argentina, pero los escritores que participaron en el Maratón de Poesía y Cuento (del 11 al 14 de junio en Punta Alta) pusieron alas a sus plumas y volaron hasta el sol. ¿Qué cosa la palabra? ¿Cuán difícil es comunicar nuestros sentimientos, pensamientos, sueños, ilusiones, planes, cuán difícil explicar al otro nuestra propia verdad, con cuánta pasión intentamos los seres humanos llegar al otro, al amigo, al esposo, a ella, a él, a ellos...! ¡Qué terrible el trabajo del escritor! !Cuánta fascinación hay en el intento de inventar otros mundos, otros seres, vestirlos, ponerlos en acción, darles dirección, amarlos...

    "Ella nunca supo

     que ese amor ancestral

     transmutado por cientos de miles de millones

                de genes

    se resumía, diáfano,

   en la espumita del café batido." (Sergio Soler)

   ¡Aye! ¡Cuántos versos! ¡Cuántos cuentos leídos! Conferencias, ponencias, debates, inter-cambio de ideas, pizza y birra, mate, una pausa para ver un show de danzas españolas, presentación de libros, una función del "Corazón Delator" de Edgar A. Poe en el Bar Central de Punta Alta...y, ya a media noche y después a dormir un rato, luego café, caminar por la calle Mitre con algún escritor amigo, pensar, inventar historias, compartirlas con el taxista...

   "Extraño la enormidad

              de mi ser

cuando me amabas." (Gladys Acha)

   Y no faltaba la filosofía, Nietzsche, por ejemplo:

   "Sobre el sepulcro de los Dioses de la moral, el viejo sátiro de la filosofía danza entre hogueras paganas. El eco de sus palabras estremece el origen mismo de los tiempos. Los frágiles pilares de la mediocridad. Perspectiva del paisaje eterno del caos, ángeles travestidos en dragones, máscaras de los espectros de ls imagen, oscura religión de los caracoles." (Leonardo Herrmann)

   La naturaleza, entorno histórico del poeta:

   "Sólo deseo que el sonido

   de mi canto, se mezcla a

   tus sonidos naturales, el

  viento con la lluvia y con

  la nieve, el agua del

  deshielo, que bajando

  forma los chorrillos, y

  caprichosamente,

serpenteando...atraviesa

  las túrbales..." (Blanca Azucena Ferrer)

  Y las penas:

"Seres abstractos

              devoran las noches;

dolor y más dolor,

              pesadillas sin fin...

inconsciencia pura,

             deseos abstractos;

realidad...

¿Abstracta?"

   El amor:

"Vamos a besarnos de papel," escribe Marcela Predieri:

"a roernos las palabras

                   las encías

que la sangre de las líneas fluya

                   que nos emborrache

que seamos una sola sábana

                    o versopiel

más allá del poema o la lujuria.

Vamos con boca a lengua ajena

                   a desbesarnos

a arrancarnos los corpiños

                  lo más temible

lo mejor de cada uno."

¿Y la biología? Daniel Toro Revadeneira, de Quito, Ecuador, estudiante de biología:

"ANFORIA

Si tan solo

viajar de la noche al día

no llevase arco-retinas de distancia.

 

Por un sueño

cada sol más protervo e hiriente

cada enjambre

más punzante e ignoto.

 

Encallando en párpados de otros mundos

recencellando su mar en el cuerpo

para verterlo groseramente

sobre este estroma

con cáscaras de luces secas

con geodas de algodones enrojecidos

y a la derica raudos

por mis remeros ojos."

   No. Estos es injusto. No podemos dar a conocer a todos los trabajos. Ni mucho menos. Es injusto. Lo fascinante es, era, y será, entrar en el mundo particular de cada escritor, escuchar su voz, observar sus gestos, sentir su dolor o su alegría, sus penas,  su criterio sobre este mundo tan complejo e injusto que nos rodea y nos da (por ahora) aliento.

   Uno caminaba por las calles de esta pácífica ciudad, a 40 minutos de Bahía Blanca, a siete horas de Buenos Aires, escuchando el terrible ruido de los coches--que van todos apurados, como si estuvieron conduciendo en el microcentro porteño--escuchando verdades y mentiras, como siempre. Por ejemplo, que Punta Alta cuenta con tal vez el mejor nivel de vida en Argentina. Claro, el 60% reciben su sustento de la Marina, principal ingreso de la ciudad. Luego, uno habla con un taxista que te lleva a la zona de la Pareja, pasando por la alcantarilla a cielo abierto, cuyo olor nada de poético tiene, un disastre ecológico, contaminación alarmante, en la cual nadan hermosas aves, flamencos rosados...