Afrodescendientes: Después de un siglo...a ver cuántos hay en Argentina

    En 2010 algún estudiante universitario podría tocar la puerta de alguna familia argentina, sus brazos llenos de papeles oficiales, y preguntar: "¿Usted o alguna persona de este hogar es o tiene antepasados de origen afrodescendiente o africano (padre, madre, abuelos/las, bisabuelos/las)?" Es uno de los interrogantes que figurará en el censo de 2010. Parece mentira, pero la última vez que las personas de raíz africanas fueron incluídas dentro de las estadísticas oficiales fue en 1896.

    Llama poderosamente la atención la exclusión de las comunidades africanas de los datos oficiales, pues los historiadores estima que alrededor de 1810 uno de cada tres porteños eran afrodescendientes. ¿Qué pasó? Hoy en día incluso en barrios como San Telmo son muy pocas las personas que aparentan tener raíces africanas. Es cierto que quienes llegaron como esclavos luchaban valientemente y en las primeras filas en guerras como la de la Triple Alianza. Es cierto que plagas como la fiebre amarilla mataron a muchos pobres (los ricos y estancieros mudaron de San Telmo y Barracas a barrios más altos), pero son muy escasos los datos que pueden explicar la diáspora.

    Oficialmente, no hay reconocimiento aún para la influencia de las comunidades africanas en el tango, el folklore, el baile y en la cultura popular, en el idioma, en el carnaval. Oficialmente, además, son muy pocas las personas que aceptan la existencia de discriminación en Argentina, o bien la asocian a las dificultades sociales de los llamados "cabecitas negras" (personas del interior de piel oscura debido a parentezco con indigenas que llegar a Buenos Aires en la época del 1945-55, bajo el gobierno de General Perón)

    La decisión de incluir preguntas sobre afrodescendientes se enmarca en acciones llevadas a cabo en la mayoría de los países del mercosur, por ejemplo, en Uruguay y Brasil, que ya han incorporado a las comunidades africanas a sus censos.