"Del aceite a la cacerola," una forma de contar la historia argentina con una carcajada
No es fácil contar la historia argentina en algo más de una hora, sin quedar en frases hechas o sin lastimar los sentidos del espectador. Es algo que muchos autores de teatro han intentado, no siempre con éxito. Lo asombroso de la puesta de Patricia Corsanego de "Del aceite a la cacerola" que se presenta en reestreno en el teatro Andamio 90 de Buenos Aires es la actuación sobresaliente de Carlos Duramona, Roberto Cortizo Petraglia (autor de la obra) y Mariano Falcón, más los recursos técnicos mediante un video que transmita sobre una pantalla en el fondo del escenario secuencias y rostros de la historia--como se sabe, repleta de situaciones complejas, intrigas, cambios abruptos, celos, desafíos y sensaciones encontradas.
Según La compañía de teatro juglares, encargada de la puesta, "la propuesta consiste en contar la historia argentina desde una cocina que bien podría ser la del fuerte de Buenos Aires ante las invasiones inglesas, la del Cabildo o la de la Casa Rosada según pasen los años. En esta están aptrpados tres personajes idiológicamente enfrentados, que mientras cocinan son testigos de los cambios y sucesiones políticas, al tiempo que las comidas y los gustos irán variando según el gobernante de turno. Nosotros queremos jugar pensando en el té de las cinco durante las invasiones inglesas, el paté de foi de Liniers, el puchero de Yrigoyen, la pizza con champán, el sushi, el cordero patagónico, etc. "
La acción está en manos de un trío: dos cocineras (en realidad, hombres) y un militar, siempre con hambre. Las dos cocineras representan dos polos claramente diferencidos: una que siempre se adapta al que sube--excepto cuando sea populista, "negro" o peronista--y otra que aplaude todos los progresos pero siempre ve sus sueños frustrados (hasta el final, un incógnito). La cocina se ubica convenientemente en el subsuelo.
Cabe destacar el fino trabajo expresivo, el recurso de la pausa justa, las miradas, el chillido histérico, cierta complicidad con el público y el uso a la vez estética y funcional del espacio. La puesta consiste en una mesa cubierta de verduras y utensillos de cocina; detrás la pantalla donde se proyectan las secuencias históricas muy bien escogidas-
El espectáculo pierde algo de ritmo hacia el final, tal vez debido a la cercanía con los hechos más recientes de la historia argentina--aunque también hay momentos de gran emoción para el público argentina, el retorno de Juan Domingo Perón, durante la dictadura militar, las Madres de Plaza de Mayo exigiendo la aparición con vida de sus familiares secuestrados...
Sería bueno acercar el espectáculo a estudiantes y en efecto se ha realizado un convenio con la Dirección Nacional de Políticas Socioeducativas del Ministerio de la Nación a cargo del Licenciado Jaime Perczyk, para que los alumnos del interior del país que visitaran por primera vez la ciudad a partir de enero presencien el espectáculo, y ha sido solicitado por la Secretario de Educación del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para realizar funciones a los alumnos secundarios que están en su colonia de verano durante el mes de Febrero.
Las funciones:
Jueves a las 19:30 horas y Viernes a las 20:30 horas
Teatro Andamio 90, Paraná 660, Ciudad de Buenos Aires.
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