A 33 años del golpe militar, canciones, repudio y no a la pena de muerte

Fue frente a Tribunales, en Buenos Aires: gran cantidad de gente repudió ayer el más sangriento golpe militar en la historia argentina--el 24 de marzo de 1976--con músicos, cantantes, dirigentes políticos, madres de Plaza de Mayo, hijos y familiares de los 30,000 desaparecidos...en "defensa de la vida" y "contra la pena de muerte."

Coincidencias llamativas: alguién encontró la tapa de un diario de la época, la amplió y la pegó a un poste. El texto de la nota en "La Nación" dice: "La Sociedad Rural Argentina reitera frente a los productores y la cuidadania en general su apoyo a toda acción que significa completar el proceso iniciado el 24 de marzo de 1976 para poder lograr así los fines propuestos que en definitiva son los grandes objetivos nacionales."

Los medios mencionados incluían el secuestro, la tortura, el establecimiento de campos clandestinos de concentración y el asesinato de al menos 30,000 personas, entre militantes populares, sindicalistas, negociantes, escritores, periodistas, religiosos, estudiantes y gran número de víctimas sin vínculos con la lucha contra el gobierno militar; además, la apropriación de babés de los secuestrados, el robo de bienes, la censura y el endeudamiento del país en aproximadamente 46 mil millones de dólares.

El golpe militar fue abiertamente apoyado por grupos como la Sociedad Rural, sectores importantes en la jerarquía de la iglesia católica, sectores económicos de gran influencia y tuvo al principio incluso el consentimiento silencioso de importantes sectores de la clase media y de partidos políticos, sin hablar del guiño de los Estados Unidos. Varios de los máximos dirigentes del golpe recibieron entrenamiento en los Estados Unidos acerca de la llamada "guerra contra-subversiva."

Sucede que hoy muchos de los mismos grupos están agrupados en la oposición al gobierno de Presidenta Cristina Fernández, incluyendo la Sociedad Rural y diversos grupos de interés del campo y en las ciudades, y personalidades como Susana Gímenez, que reclaman el fin de los juicios contra los militares acusados de crímenes y el establecimiento de la pena de muerte para criminales comunes que atacan, roban y matan. Níngún dato confiable confirma la existencia de mayor criminalidad hoy que antes, aunque la brutalidad y osadía de los atacantes hoy es llamativamente peor...cosa que llama la atención pues...el grado de brutalidad del gobierno militar parece tener inevitablemente su correlación con la inseguridad de hoy.

Es razonable sospechar que detrás de la campaña en los medios contra la "inseguridad," están muchos de los mismos intereses que apoyaron o se callaron frente al avance de los sectores de derecha vestidos entonces en uniformes militares y ahora en ropas civiles.