Blogia
Buenos Aires Jaque Press, en inglés y español

"Reír a carcajadas hasta el final..."

"Reír a carcajadas hasta el final..." María, la psicóloga, grandes lentes de plástico, gestos nerviosos, saltaba entre los solos y solas que estaban reunidos en la confitería en un barrio alejado del centro de Buenos Aires.

Explicaba que estaba tratando de dejar de fumar y pedía disculpas por su estado crispado. Los participantes tenían que decir qué harían si el mundo llegara mañana a su triste y esperado final.

“Reír a carcajadas hasta el final,” decía un hombre de cara abandonada y triste, “reconciliarme con mi mujer y hacer el amor con ella hasta...comenzar una novela que terminaría con el fin del mundo…”

Pero hubo propuestas aún más audaces. Una mujer delgada, muy atractiva, cabello negro largo, piel furiosamente blanca, con ojos melancólicos, propuso “hacer una fiesta de sexo, droga y rock and roll.” Luego de la carcajada generalizada, alguien le preguntó si la propuesta era en broma o en serio. “Las dos cosas,” respondió, forzando una sonrisa tipo Mona Lisa.

Un hombre gordo, de sonrisa fácil, lanzó una solución un poco más amena: preparar primero una comida con carne de primera, rozada de vino tinto, luego tomar copas hasta lograr un estado de felicidad ideal y recién después "amarnos entre todos."

Cada uno con su historia. Abandono. Rechazo. Caminos divergentes. Parejas que viven en la misma casa, pero como zombis, sin tocarse, sin besarse, cada parte deseando en secreto lo que en la práctica rechazaba...y palabras, palabras, palabras...y silencio...

¡Pobres los seres humanos! Buscan el amor con desesperación, luego actuan como si ese estado tan buscado no existiera y luego reclaman cuando el rechazo rebota en sus rostros. Apuntan con amunición gruesa al corazón y al alma, tiran, y se asombran cuando él o ella responde con balas aún más venenosas.

Cambalache, siglo 20...¿siempre ha sido así? ¿Siempre será así?

¿Es la vida misma la que nos hace jugar este sugestivo juego de "te amo" y "te odio?" Participamos en este dulce juego hasta el día cuando la negra y temida muerte reclama carne y hueso para reciclar la vida? Quizás.

0 comentarios