"Imágenes del Louvre," una muestra envuelta en el mal olor del Riachuelo y la sombra inquietante de la noche...
Una salida para los amantes del arte clásico: "Imágenes del Louvre: seis siglos de pintura europea," una muestra de grandes reproducciones que el curioso puede examinar desde el Puente Trasbordador hasta Caminito en el colorido barrio de Boca en la Ciudad de Buenos Aires. Los cuadros realmente son bellos y los comentarios muy interesantes--pero el visitante tendría que tapar la nariz muy bien, pues el olor a podrido que viene del Riachuelo es francamente insoportable, especialmente durante los días de viento y altas temperaturas.
Además del mal olor, y por increíble que sea, muchos cuadros ya han sido castigados por delincuentes sin fibras sensibles para el arte. Para colmo de males, mientras el sol se esconde en el horizonte el terror a la violencia callejera asoma en el aire como un fantasma omnipresente, produciendo la huída en masa de artesanos, negociantes y los dueños de los pocos cafés y restaurantes que quedan en la zona. La noche cubre la muestra y toda la zona en una nube de oscuridad, pues la iluminación es tan escasa como la presencia policial. Para verificar nuestra rara sensación de estar en un osasis de día y desierto de noche entramos en el famoso bar a la esquina con Caminito.
--¡Hola! ¿Hasta qué hora está abierto? La moza nos miró con talante algo alarmado y dijo:
--Y...hasta las 19 o 20hs, pues...hay mucha inseguridad...no se puede trabajar después...está todo oscuro...todo el mundo se va.
Durante las dos horas de nuestra visita no apareció a la vista ningún policia, ni pensar la situación en la zona cuando el sol se acuesta tranquilo en el cielo...
De todos modos una visita a la muestra y a la zona es una experiencia profunda. Siendo un poco filosófico, uno puede afirmar que para apreciar la belleza hace falta también conocer el otro extremo: lo feo, lo inhumano, la falta de criterio, el desdén por el medio ambiente, la no preocupación por el riesgo de la contaminación. Se calcula que alrededor del 15% de la población argentina habita la cuenca del Riachuelo (alrededor de 5 millones de personas). Cerca de 800 mil no tienen agua potable, según un estudio de ETOSS, y existen alrededor de un millon de cloacas de aguas servidas. No más del 65% de las más de tres mil empresas en ubicadas alrededor del río producen 80% de la contaminación.
Según un estudio de la página web Ambiente Ecológico, algunos de los contaminantes presentes en el agua son: arsénico, cadmio, cromo, cobre, mercurio, níquel, plomo y zinc, sin mencionar polutantes o contaminantes químicos orgánicos, hidrocarburos alifáticos, hidrocarburos aromáticos, biocidas, plaguicidas insecticidas, compuestos organoclorados, organofosforados, bifenilos policlorados, compuestos orgánicos persistentes, entre otros.
No hay que ser experto para afirmar que las miles de personas que viven alrededor de la cuena están en grave riesgo de salud, especialmente los niños...
Como es de público conocimiento, se ha anunciado desde el gobierno y desde hace décadas programas de limpieza pero hasta ahora se ha realizado ningura tarea significativa de mejor uno de las cuencas más contaminadas en el mundo. Todos los porteños se acuerdan de la promesa de la Ministra de Medio Ambiente del ex presidente Carlos Menem, María Julia Alsogaray, de limpiar el río en 1000 días, incluso prometiendo costas aptas para la natación; igualmente en la memoria está el préstamo del BID de $250 millones para el dragado y limpieza del Riachuelo (la mayor parte de los fondos fueron reasignados para pagar los planes sociales del gobierno).
Volviendo a la muestra: impacta la diversidad de estilos y la gran sensibilidad de los artistas que lograron grandeza de expresión artística sublime a lo largo del período durante el cual Europa sale del oscurantismo, reyes y nobles acumulan riquezas sin precedentes y, tras conflictos religiosos, políticos y económicos, se consolida el sistema colonial como paso previo al liberalismo capitalista...Cierto será entonces que la belleza siempre tiene su rostro contrario oculto y listo para sorprender en el momento menos prevenido...
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